martes, 14 de febrero de 2006

Relato Brevísimo

......... y la joven misteriosa, ausente en fondo, quizá no en cuerpo, mantenía su mirada intensa en aquellos colores que sobresalían de la puerta de enfrente. Se acercó sigilosamente, de forma premeditada, esperando encontrar algo que la mantuviera el alma con la tensión que habia adquirido. Apenas a un metro, sintió una duda, se paralizó, su respiración era demasiado intensa como para ocultarla. Trago saliva en un par de ocasiones. Su garganta reseca necesitaba líquido de cualquier tipo.... oyó un ruido, y ese fue su declive. Su postura cambió. Sus ojos se resignaron y su cuerpo cedió en la otra dirección. Huyó, porque la duda le generó un temor que apenas pudo contener. Su escapatoria era su salvación. Ahora estaba tranquila, pero sin saber qué había detrás de esas luces incesantes cada noche. Quizás la siguiente madrugada afrontaría ese reto. Hasta entonces le quedaba sólo una cosa, la duda, la que nos hace avanzar o retroceder en la vida. Tarde o temprano la abrirá (o no).

jueves, 9 de febrero de 2006

Sueño con otra mente

Pido que se apiade de mi
esta cabeza de mente insana
que me tortura cada minuto
por sólo pensar o recordar.

Necesito que cambie su camino
que afronte nuevas ramas
y crezca por ellas vírgenes
y ausentes de pensamiento alguno.

Solicito que este eclipse venza
y me deje observar más allá
con luz de un nuevo día
que anochezca por fin estas horas.

Sueño con una noche libre
de preocupaciones no obsesivas
que me permitan vivir esta vida
dominándola sin llantos ni dolor.

Deseo renacer de nuevo
porque mi vida se queja
la noto angustiada y mustia
y tengo secuelas de ella.

Sólo deseo amar amándote
Sólo quiero sonreir sin peros
Sólo podría seguir así por tí
porque mi mente ya ocupó su hueco.

Mis palabras enmudecen

Cuando transcurren paralelas a un río cargado de pólvora.
Cuando amanezco deslabazado por lluvias grises de tristeza.
Cuando reflejado por error aprecio mi mirada oscura en un cristal de la ciudad.
Cuando el aire se me agota a media tarde porque mi ilusión desapareció a medio día.
Cuando deslizan gotas desde mi cristalino cargadas de un dolor menor de lo que creo.
Cuando me desvisto bajo mis sábanas a media noche con Bach de fondo.
Cuando júpiter se cruza en mis sensaciones y me desnuda de la energía que me sobrevive.
Cuando vibran mis manos por el descontrol que rige mi no vida
Pero también ...
Cuando apareces con un gesto nervioso a escasos metros de mis pies.
Cuando envejecemos de experiencias con manos acariciadas de AMOR.
Cuando me siento dentro de ti, el climax de mi vida..de mi razón.
Cuando desnuda iluminas mis ojos comenzándome a vivir como recién nacido.
Cuando sonríes con la dulzura más sútil que mis oídos han comprendido nunca.
Cuando besas mi ansiosa boca aportándome tu sangre en gotas de flujo.
Cuando separas mis demonios con llantos que liberan mi mente algunos minutos.
Cuando me duermo sobre tu imagen.
Cuando te entregas adolescentemente transformando madurez en pasión desmedida.
Cuando me miras enamorada, matándome de felicidad..si fuera posible.
Cuando me agarras el brazo orgullosa en paseos madrileños
sin darte cuenta que ese orgullo es quien me gobierna en esos instantes
por pasear ante la belleza, ante la sensibilidad, ante la pasión de una mujer
que escapó de calificativos desde el día que dijo que me amaba.

GRACIAS. Eres mi unica vida. Mi pasión diaria. Mi futuro.

Te Amo.

miércoles, 8 de febrero de 2006

...Fragmento de todavía "Sin título"

Sonó el despertador con su distorsionado timbre, a apenas unos centímetros de su almohada. Steve se hizo el despistado, pero el sonido era demasiado violento como vencerle el duelo. Comenzó a estirar sus brazos, lo suficiente como para atinar con el maldito aparato. Lo consiguió tocar, pero su postura en diagonal sobre la cama le impedía presionar el gran botón rojo que detendría esa estridencia diaria. No tuvo más remedio que adoptar otra más ortodoxa y así alcanzar su objetivo. Los dígitos marcaban las 6 y media a.m. Era Jueves según recordaba, con la conciencia un poco aturdida por las escasas horas de descanso que le había dedicado a su cuerpo. Para más INRI, anoche bebió más de la cuenta y todo sumaba puntos a favor del sueño.

Se sentó sobre la cama, apretó sus ojos aún medio cerrados y estiró nuevamente los brazos para trabajar un poco sus músculos abandonados desde hace ya demasiado tiempo. Muy lejos quedaron sus aficiones por los deportes -especialmente el Hockey- y su cierta obsesión por un físico atlético. Hacía ya una década que esas preocupaciones no rondaban por su cabeza. Se levantó con algo de desequilibrio y se dirigió con un nulo interés (como si fuera un niño dirigiéndose a la ducha) hacia el baño de su limitada habitación. Apenas una cama, eso sí , de matrimonio, una mesilla pequeña que le servía de cómoda y una silla - sacada de su lugar, el salón - donde colocaba minuciosamente la ropa que había llevado ese mismo día.

Apoyado en la pared contraria a la cama, se encontraba su saxo tenor, reluciente como el primer día, ya que era el único objeto (incluso adornado como persona por él mismo) que trataba con el cariño necesario como para mantenerlo cerca de él en buen estado. La noche anterior acabó siendo pesada, de ahí que no tuviera las fuerzas necesarias como para protegerlo en su estuche mitad regalado mitad comprado. Engaño a un pobre anciano para obtenerlo a un precio ridículo.

Steve tenía 27 años y vivía sólo desde que se quedó huérfano de su madre hacía una década. Su padre desapareció bastante antes de que él comenzara el colegio. Apenas vió la luz y ya sólo podía contar con su progenitora de nombre Carol, pero llamada Car, una mujer muy linda y apasionada que vivió para él mientras la salud se lo permitió. Un cáncer de Colon le separó de su hijo, que quedó desamparado sin más familia que una tía solterona de la que no tuvo queja en los dos años en los que más la necesitó. El insistió en quedarse en esa casa y no acogerse a la protección que su tía Jennifer le ofrecía en Boston. El ya trabajaba con 17 años y podía permitirse vivir sólo en su casa de Nueva Orleans.